Metges de Catalunya (MC) cree que posible aprobación del proyecto de presupuestos del Govern para el año 2015 agotará la paciencia del personal médico, porque concentra los recortes salariales adicionales en los profesionales del sistema público de salud, a los que se les mantiene la reducción de la mitad de la productividad variable, mientras que, por primera vez en cinco años, se exonera al resto de empleados públicos de las medidas complementarias de austeridad salarial.
No obstante, el sindicato ve difícil que las cuentas se acaben aplicando puesto que, por una parte, están supeditadas a la negociación política con el Estado al que el Govern reclama 2.183 millones de euros de deudas acumuladas durante los últimos años y, por otra, no tienen de momento el suficiente apoyo parlamentario. Es por ello que MC considera que los presupuestos diseñados por el conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, son de "atrezo" y se mueven en un "marco teórico irreal" que pone en peligro, incluso, la recuperación de la paga extraordinaria a los empleados públicos.
En cuanto a la partida destinada a Salut, que asciende a 8.399 millones (un 1,3% más que en el año 2014), la organización opina que es "del todo insuficiente para reflotar la sanidad pública del tsunami de recortes" y más cuando, a partir del próximo 1 de enero, el sistema deberá asumir el incremento del 10% al 21% del IVA sanitario, a raíz de una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Ante este escenario, MC califica de "vergonzoso" que el Govern aproveche la ley de acompañamiento de los presupuestos para modificar el reglamento del Institut Català de la Salut (ICS), para que los cargos directivos que prestan servicios conjuntos en dos o más centros, en el marco de las alianzas estratégicas o proyectos de gestión compartida, puedan percibir un 30% más de su sueldo, mientras que la movilidad laboral de los profesionales implicados en estos nuevos modelos de gestión "no se ve compensada de ninguna manera".
Además, censura la desaparición del tope salarial para los directivos públicos, incluido en la ley de acompañamiento de los presupuestos de 2014, que establecía que las retribuciones íntegras anuales de este personal no podían superar las fijadas para un conseller, "por lo que mientras se consolidan los recortes salariales a los médicos, actualmente hay nueve gerentes de consorcios y empresas públicas sanitarias que cobran más que un conseller e, incluso uno de ellos, más que el presidente Artur Mas", según el portal de Transparencia de la Generalitat.