Metges de Catalunya (MC) apoya la movilización de los facultativos del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona que este jueves se han concentrado a las puertas del recinto hospitalario, para protestar contra la decisión del centro de disminuir las horas de trabajo del médico, mediante la reducción de las horas de guardia y la modificación de los horarios laborales.
La medida, que busca ahorrar 600.000 euros este 2013, ha levantado una enorme enojo entre la plantilla médica, hasta el punto que representantes de los servicios asistenciales del Vall d'Hebron han recogido el apoyo de 1.200 de los 1.500 facultativos del centro, que han firmado un documento de protesta. Estas firmas se entregarán, próximamente, el gerente del hospital, José Juan Navas, y al del Institut Català de la Salut (ICS), Joaquim Casanovas.
En el escrito, los facultativos alertan del "deterioro progresivo" de la calidad asistencial, debido a las medidas de austeridad aplicadas por la dirección del centro que, a partir de este mes de julio, modificará los horarios laborales de los facultativos y el inicio de la atención urgente que pasará de las 17.00 a las 22.00 horas.
Asimismo, el hospital tiene previsto que las guardias de algunos servicios como nefrología, rehabilitación y urología pasen a ser atendidas por un médico residente en formación (MIR), mientras que el médico especialista de plantilla, que hasta ahora realizaba las guardias de presencia física, solo estará localizable.
"La situación es límite y no queremos ser cómplices de unas decisiones que se han tomado a espaldas de los facultativos", denuncian los profesionales del centro, que a la vez advierten del peligro de desorganizar los servicios, por las graves consecuencias que ello comportaría sobre la calidad y la seguridad de la atención sanitaria.
MC ha denunciado recientemente que la Conselleria de Salut quiere reducir en más de 106 millones de euros el presupuesto de los ocho hospitales públicos del ICS para el 2013, y que uno de los centros más afectados será el Vall d'Hebron con un recorte del 8,04% (45,6 millones de euros menos) con respecto al gasto real de 2012.