Tercera reunión de la Mesa de Salut para abordar los efectos laborales de los recortes sanitarios y las patronales siguen sin concretar qué medidas aplicará cada centro para cumplir con el plan de ajuste presupuestario que les impone el Departament de Salut.
Ante este oscurantismo, Metges de Catalunya (MC) ha dejado muy claro que difícilmente se podrá alcanzar un acuerdo para minimizar los efectos laborales de los recortes, si las empresas sanitarias no detallan la afectación de las medidas de choque en los centros de salud.
"No les podemos dar un cheque en blanco ante la falta de información. Nos piden mucho esfuerzo a cambio de pocas garantías", ha criticado el secretario general de MC, Antoni Gallego, a la salida de la reunión que se ha celebrado este jueves en el Departament d’Empresa i Ocupació, que actúa como mediador.
La Unió Catalana d’Hospitals (UCH), el Consorci de Salut i Social de Catalunya (CSC) y l’Associació Catalana d’Establiments Sanitaris (ACES) se han limitado a presentar datos económicos generales y a amenazar, una vez más, con despedir a más personal, si los sindicatos no aceptan rebajar el 5% del sueldo por convenio, aumentar la jornada laboral de las plantillas y condicionar la retribución variable por objetivos al cumplimiento del presupuesto a finales de año.
El Institut Català de la Salut (ICS) tampoco ha explicado qué acciones emprenderá para consumar el recorte presupuestario, aunque es evidente que ya ha dejado de renovar miles de contratos eventuales, en una especie de expediente de regulación de empleo (ERE) encubierto.
Gallego ha reiterado que el sindicato no aceptará el "chantaje" de las patronales y ha lamentado que la negociación haya entrado en un "callejón de difícil salida" por la falta de transparencia de las empresas sanitarias.
Por su parte, el presidente de MC, Albert Tomàs, que también ha participado en la reunión de casi cuatro horas de duración, ha recriminado a las patronales su visión exclusivamente economicista de la crisis: "La salud no es una industria, sino un servicio público y no parece que a las patronales les interese demasiado las repercusiones que tendrán los recortes en la calidad asistencial".
Todas las partes se reunirán la próxima semana en un último intento de consensuar un acuerdo. Si éste no se produce, la Mesa de Salut se disolverá.
MC ha solicitado a Empresa i Ocupació que también asistan a esta reunión representantes del resto de proveedores sanitarios afectados por los recortes y que no están adscritos a las patronales UCH, CSC y ACES.
Este es el caso del consorcio Parc de Salut Mar de Barcelona que ha iniciado los trámites informativos para elaborar un ERE que afectará a 194 trabajadores, de los cuales 43 son médicos.
