MC apuesta por la educación sanitaria y la formación médica continuada para neutralizar el movimiento antivacunas

Viernes, 21 Agosto, 2015

Metges de Catalunya (MC) se muestra partidario de profundizar en la educación sanitaria de la población e intensificar la formación médica continuada antes que recurrir a la imposición de sanciones a los médicos que se posicionen contrarios a la vacunación, tal como ha sugerido el presidente del Col·legi de Metges de Barcelona (COMB), Jaume Padrós.

El sindicato reconoce que el movimiento antivacunas ha crecido y puede convertirse en un problema de salud pública si no se aplican medidas dirigidas a concienciar a la sociedad sobre la necesidad de la inmunización. En declaraciones a Onda Cero, el secretario general de MC, Francesc Duch ha asegurado que el cuestionamiento genérico de las vacunas es "totalmente reprobable", ya que no se fundamenta en la evidencia científica sino que se trata de una “cuestión dogmática de carácter sectario". La repercusión de este tipo de comportamiento, alerta, tiene una repercusión directa sobre la salud la población, especialmente sobre la de los niños.

Sin embargo, Duch considera que antes de tomar medidas extremas, como la imposición de la vacunación obligatoria o la persecución de los facultativos que se oponen a las inmunizaciones preventivas, conviene fomentar la función pedagógica para contrarrestar las campañas contra las vacunas que de un tiempo a esta parte han ido ganando adeptos.

En cuanto a los llamados 'médicos antivacunas' que la organización señala como "muy minoritarios", Duch pide diferenciar entre los que se oponen a las inmunizaciones de forma global, que actúan profesionalmente de forma "reprobable", y los que cuestionan aspectos concretos relacionados con la eficacia o la relación coste-beneficio de algunas vacunas.

En este sentido, encuentra razonables y justificadas algunas de las dudas que han suscitado determinadas vacunas, como la del papiloma humano, o respecto a la determinación del calendario vacunal a la hora de elegir el mejor momento para administrar las dosis que consigan una inmunidad adecuada frente a la infección que se quiere prevenir, como en el caso de la vacuna de la varicela. Duch también ve comprensibles las reticencias de muchos facultativos contra determinadas vacunas experimentales que no disponen de suficiente experiencia de uso, como ocurrió con la campaña de vacunación masiva durante la epidemia de gripe A (H1N1) de los años 2009 y 2010.

Con todo, el secretario general de MC insiste en que el cuestionamiento global de las vacunas "no es racional" y puede conllevar situaciones graves e irreparables como el caso de difteria que ha acabado con la vida de un niño de Olot.