El secretario general de Metges de Catalunya (MC), Francesc Duch, ha lanzado un mensaje diáfano al futuro Govern de la Generalitat, con el objetivo de reflotar la sanidad catalana después de cinco años de austeridad: “Sea cual sea el futuro político del país, el sistema necesita recuperar el presupuesto previo a los recortes y ceder el pilotaje de la gestión al médico. Este tiene que ser el desafío para el próximo ejecutivo catalán”, afirma en un artículo publicado este lunes en la revista mensual El Economista Catalunya (ver página 30).
Para Duch, la llegada de Boi Ruiz al frente de la conselleria de Salut “ha sacudido” la estructura sanitaria, hasta el punto de hacer “tambalear” el propio sistema por culpa de los “drásticos” recortes que se han aplicado. Sin embargo, asegura que “el compromiso ético, la vocación y el sobreesfuerzo de los profesionales han permitido mantener firme sus fundamentos y, a pesar de la reducción de un total de 1.408 millones de euros (...) se han mantenido, o incluso mejorado, los indicadores sanitarios y de satisfacción del usuario”.
De todas maneras, explica que la asistencia se ha resentido y como ejemplo cita el cierre de 750 camas de hospitalización y de 66 puntos de atención continuada en la atención primaria, el incremento de las listas de espera, la cronificación de la saturación de las consultas y de los servicios de urgencia, y también, aunque de una manera desigual, la obsolescencia del utillaje sanitario y de algunas instalaciones.
Además, critica la estrategia del Departament de Salut de intentar preservar el servicio “a expensas de la sobreexplotación de sus profesionales y de recortar sueldos y condiciones laborales”, una decisión que, asevera, ha comportado un incremento de la precariedad contractual y una reducción de los efectivos humanos.
Boi Ruiz
Duch se ha expresado en los mismos términos en las páginas de El Periódico, donde ha calificado de “negativo” el balance del último mandato del conseller Boi Ruiz y ha coincidido con otras voces del sector al reclamar más dinero para la sanidad pública.
Otra de las peticiones que ha hecho al futuro Govern es potenciar el papel de la atención primaria dentro del sistema y, para lograr este objetivo, Duch ha reclamado, en declaraciones a Diario Médico, invertir la tendencia progresivamente decreciente del presupuesto asignado al primer nivel asistencial, que ha pasado de representar un 16,1% del total del gasto del Servei Català de la Salut (CatSalut) en 2010 a un 14,6 en 2014, al contrario de lo que ocurre con otras partidas funcionales de la sanidad pública que continúan creciendo.
Así mismo, ha exigido al ejecutivo catalán que frene el desarrollo de aquellas estructuras integradas y de asignación capitativa por territorio que comporten una subordinación económica de la atención primaria al hospital de referencia.