Metges de Catalunya (MC) critica el nuevo proyecto de Real Decreto del Ministerio de Sanidad que regula la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios por parte del personal de enfermería, ya que otorga al colectivo médico una representación exigua en la comisión redactora de los protocolos y guías de práctica clínica que deben ordenar estos procedimientos, hasta el punto que se podrían aprobar con el voto en contra del conocimiento médico.
Por este motivo, el sindicato pide a Sanidad que modifique la composición de esta comisión redactora y que incremente la representatividad del médico. Según la última versión del proyecto de real decreto, de los 12 miembros que integran dicha comisión, solo tres están en representación del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos. El resto representan al colectivo de enfermería, el Ministerio de Sanidad, el Consejo Interterritorial de Salud y el Ministerio de Educación.
MC ha instado en reiteradas ocasiones a los colegios de médicos catalanes a defender con contundencia las competencias médicas y a salvaguardar el correcto ejercicio del acto médico, ante las múltiples iniciativas de la Administración para delegar competencias propias de los facultativos al personal de enfermería.
El borrador de la futura norma, que llega cuatro años después de que el Congreso diera luz verde a la modificación de la Ley del medicamento para permitir a los enfermeros prescribir medicamentos (una condición hasta ahora exclusiva de médicos, odontólogos y podólogos), prevé los procesos que deberán seguir estos profesionales para poder recetar medicamentos y productos sanitarios, tanto en el ámbito de los cuidados generales como especializados.
La adquisición de competencias se podrá obtener a través de la formación adquirida en los estudios universitarios de graduado de enfermería, como también en el ámbito de la formación sanitaria especializada.
Estas competencias deberán incluir, el conocimiento de los diferentes grupos de fármacos, los principios de su indicación, uso y autorización, sus mecanismos de acción, los beneficios esperados y los riesgos asociados, así como los efectos derivados de su administración y consumo, entre otras cuestiones.
Por ello, Sanidad prevé establecer unos programas formativos semipresenciales, favoreciendo el autoaprendizaje tutorizado, con una duración de 150 a 180 horas (6 créditos ECTS, European Credit Transfer and Accumulation System) en el ámbito de los cuidados generales y de 300 a 360 horas (12 créditos ECTS) en el caso de los cuidados especializados.
Por otra parte, el proyecto de real decreto dispone que el personal de enfermería deberá disfrutar de un nuevo seguro complementario que cubra las actuaciones derivadas de la prescripción enfermera.