La dirección de Metges de Catalunya (MC) se ha reunido este miércoles por primera vez con el nuevo conseller de Salut, Josep Maria Argimon, para exponerle las reivindicaciones y preocupaciones principales del colectivo, trinchado por las penurias de más de una década de recortes y el agotamiento extremo provocado por la pandemia de COVID-19, y pedirle que asuma con determinación el reto de establecer un acuerdo médico común, con el objetivo de dignificar las condiciones laborales y salariales de los profesionales de la medicina.
La comitiva sindical, encabezada por el presidente y el secretario general de MC, Jordi Cruz y Xavier Lleonart, respectivamente, ha trasladado a Argimon y también a la nueva directora del Servei Català de la Salut (CatSalut), Gemma Craywinckel, presente en la reunión, la urgencia de retomar los trabajos jurídicos iniciados en 2017 para encontrar el encaje legal a este gran pacto profesional que debería incumbir a todos los médicos y todas las médicas de la sanidad pública y concertada, incluido el personal médico de la red sociosanitaria y de salud mental.
Los representantes del sindicato han instado a los dirigentes de Salut a aprovechar la actual crisis sanitaria, no solo para repensar el modelo asistencial, sino también para proyectar un cambio en las relaciones laborales con la profesión, que cristalice en un acuerdo de mínimos de aplicación a los convenios de los sectores.
Por otra parte, han hecho saber a Argimon que, sin un incremento real de la plantilla médica, la "recuperación y transformación" del sistema que pregona la nueva cúpula de Salut será quimérica, dado que la sanidad catalana necesita antes recuperar los más de 800 facultativos de atención primaria perdidos durante los recortes, cubrir las especialidades médicas deficitarias, planificar el recambio de los 14.000 profesionales que se jubilarán hasta 2035 y mejorar las condiciones laborales y retributivas para fidelizar y atraer el nuevo talento médico.
Tras este primer encuentro protocolario, ambas partes se han emplazado a mantener nuevos contactos para intentar construir consensos que permitan dignificar la profesión médica y, al mismo tiempo, reformular el sistema, desde una perspectiva clínica y profesional.