"Tenía una ruta fijada y ha llegado el momento de poner el punto y final. Me merezco un descanso. Quiero dedicar más tiempo a mi familia". Patricio Martínez, secretario general de Metges de Catalunya (MC) entre 1986 y 2008, abandona la primera línea del sindicalismo, tras haber dedicado 26 años de su trayectoria profesional a la defensa del ejercicio médico. Lo hace anunciando su retirada definitiva de la directiva de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), donde ha ocupado la Secretaría General durante los últimos cuatro años.
Con la voz entrecortada, Martínez asegura, sin embargo, que continuará "siendo útil" en el desarrollo de su profesión: "Estoy dispuesto a seguir trabajando como afiliado de base de Metges de Catalunya y a dar mi consejo a quien lo quiera tener en cuenta".
Tiene muy claro cuáles son las coordenadas del nuevo sindicalismo médico y lanza un mensaje directo a los sindicatos médicos. "El futuro pasa por olvidar la reivindicación del trienio", explica Martínez, que reclama "poner las luces largas" para llegar a crear la "mesa del conocimiento".
"Tenemos que luchar para que la representación médica no emerja de las urnas. Necesitamos una mesa de participación y negociación exclusiva para médicos, vinculada a las decisiones de las administraciones y de las empresas sanitarias", afirma. "Debemos abandonar la mesa del capital trabajo y construir, entre todos, la mesa del capital conocimiento".
Sólo así, asegura, el médico podrá recuperar el "orgullo profesional" y devolver al ciudadano la confianza que le ha depositado, "con la satisfacción del trabajo bien hecho y proporcionándole una calidad asistencial digna".
Martínez es consciente de que la CESM debe "repensarse" y "actualizarse" a los nuevos tiempos. Y en este nuevo escenario, señala que MC tiene que estar para "decidir el futuro de la confederación”. "Catalunya siempre ha sido la punta de lanza del sindicalismo médico estatal –añade– y, como tal, su sindicato debe ser el centro de gravitación de la CESM".
De su legado personal como sindicalista, destaca dos momentos significativos: la creación de Metges de Catalunya (organización heredera del antiguo Sindicat de Metges de Catalunya), junto con el desaparecido Lluís Masferrer que provenía de la Federació d’Associacions de Metges d’Hospitals de Catalunya (FAMHOC), y la constitución del Consell de la Professió Mèdica de Catalunya que, posteriormente, ha tenido su versión estatal en el Foro de la Profesión Médica.
"Con estos pilares deberíamos de ser capaces de dar forma al nuevo sindicalismo profesional médico. Sería mi sueño hecho realidad ", concluye. Un sueño, al que le falta un colofón: "recuperar el estatuto jurídico del personal médico, derogado en 2003".