El presidente del sector de Hospitales concertados de Metges de Catalunya (MC), Xavier Lleonart, ha valorado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que ha declarado nulo el pacto suscrito entre el sindicato y las patronales sanitarias el pasado 15 de febrero, que supuso la desconvocatoria de la huelga de facultativos prevista para ese mismo mes. En un artículo de opinión publicado en Redacción Médica, Lleonart advierte que la resolución judicial establece un peligroso precedente que "socava la esencia misma del sindicalismo". El dirigente confía en que el recurso que presentará la organización ante el Tribunal Supremo revocará la sentencia y recuerda que, a pesar del varapalo judicial, "la realidad es que MC sigue siendo el sindicato más representativo y mayoritario entre los facultativos catalanes, con más de 9.000 afiliados y afiliadas, y ostenta toda la legitimidad negociadora".
Para Lleonart, lo más grave de la sentencia es que cuestiona la capacidad del sindicato médico para llegar a acuerdos sobre las condiciones laborales de los facultativos y neutraliza la eficacia de la huelga como instrumento de presión, ya que los pactos para poner fin a las movilizaciones "pueden acabar siendo papel mojado". En este sentido, considera que la justicia no puede avalar que todas las negociaciones de relaciones laborales tengan que pasar por las manos de los sindicatos de clase "llamados mayoritarios" porque muchos trabajadores "no se sienten representados por estas organizaciones".
En cuanto a la reacción de MC después de la sentencia, el responsable de los hospitales concertados de la organización no descarta la convocatoria de una huelga "que ponga de nuevo en jaque al sistema sanitario", pero a la vez advierte que hay otras opciones de movilización "que pueden ser igual o más eficaces para hacer visible que la indignación de nuestro colectivo se encuentra en un punto de no retorno". La voluntad del sindicato, señala, es conseguir un espacio propio de negociación para los facultativos que no excluya a ningún sindicato que cuente con estos profesionales entre sus afiliados. Hacer efectivo este anhelo de los médicos y médicas se encuentra en manos de la Administración si tiene la voluntad de ofrecer una salida efectiva al conflicto, apunta Lleonart.