Metges de Catalunya (MC) denuncia la “desvergüenza" del Grupo Parlamentario Catalán (CiU) en el Congreso por repetir la misma operación del año pasado y presentar una enmienda al articulado del Proyecto de Ley de Presupuestos del Estado para el 2016 para que al personal de los centros sanitarios concertados le sea de aplicación el régimen de jornada y descansos del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud. El sindicato médico censura que una vez más el mismo grupo político "haga el juego a las patronales sanitarias e intente conseguir por vía estatal una legislación 'ad hoc' que resuelva a su favor lo que los tribunales de justicia niegan: que las horas de guardia médica se abonen a un precio inferior a las horas ordinarias de trabajo".
Aunque en el trámite de aprobación de los presupuestos de 2015 la misma enmienda fue rechazada tanto en el Congreso como en el Senado, el grupo de CiU -virtualmente roto- insiste en pedir al gobierno español que aplique una modificación legal para que las empresas concertadas de la red sanitaria de utilización pública (antigua XHUP) no tengan que pagar las horas de guardia médica al mismo precio que las horas ordinarias. Con este movimiento político, CiU pretende satisfacer las patronales del sector que han visto como una y otra vez, tribunal tras tribunal, la justicia daba la razón a MC hasta que el Tribunal Supremo ha establecido el criterio definitivo: las horas de atención continuada de presencia física se abonarán, como mínimo, al mismo precio de la hora de trabajo ordinaria.
Para MC, la voluntad reiterada de CiU y de las patronales de sortear las resoluciones judiciales por la vía de la reformulación de la legalidad vigente es un ejemplo de la "peor política" y demuestra un "nulo respeto por la justicia y por la separación de poderes". Además, la organización considera que en el actual contexto político es un "ejercicio de hipocresía" que un grupo político que ambiciona un nuevo horizonte nacional para Catalunya recurra a las cortes españolas para conseguir un marco legal favorable a sus intereses, al tiempo que se trata de una actuación "poco inteligente" porque supone ponerse el colectivo médico en contra a las puertas de unas elecciones.
Tal y como hizo el año pasado, el sindicato hará uso de todos los instrumentos y recursos a su disposición para que la enmienda no pase el tamiz de la comisión de Presupuestos del Congreso, ni tampoco se admita a trámite en el Senado en caso de que el grupo parlamentario catalán vuelva a presentarla para intentar que se apruebe en la cámara de segunda lectura.