MC apremia a las empresas sanitarias a blindar los diagnósticos contra las intromisiones profesionales no médicas

El Consejo Ejecutivo de Metges de Catalunya (MC) ha acordado este martes instar al Departament de Salut y a las empresas proveedoras del sistema sanitario integral de utilización pública de Catalunya (SISCAT) a establecer mecanismos para evitar que los diagnósticos médicos de la historia clínica de atención primaria puedan ser consignados por otro profesional que no sea el médico de cabecera del enfermo, como sucede actualmente con el marcaje de los pacientes crónicos complejos con una esperanza de vida reducida. 

El máximo órgano de gobierno del sindicato también ha decidido reclamar formalmente la retirada de la llamada pregunta sorpresa del cuestionario NECPAL, incluido en los programas informáticos de historia clínica, que identifica a las personas en situación de enfermedad crónica avanzada y necesidad de atención paliativa. 

Ha reiterado que se trata de una pregunta que estigmatiza este tipo de enfermos, ya que "simplifica y reduce al absurdo una situación clínica compleja" y, además, ha añadido que está formulada en "términos profanos y poco dignos de una historia clínica fundamentada en la ciencia médica". 

De este modo, el Consejo Ejecutivo ha reafirmado el documento de posicionamiento en relación con el proyecto de atención a la cronicidad y su aplicación práctica que el sindicato hizo público a finales de septiembre, con el aval de la asamblea de delegados de atención primaria del Institut Català de la Salut (ICS) en la que participan facultativos de todos los ámbitos territoriales. 

Asimismo, ha reclamado respeto a la objeción de conciencia del médico ante limitaciones del esfuerzo terapéutico en pacientes con expectativa de vida limitada, cuando no se hayan consensuado con el propio paciente y no cuenten con su explícita aprobación. 

Por último, el Consejo Ejecutivo ha querido expresar su "apoyo incondicional" a los delegados y mandos de MC que "son víctimas de cualquier forma de persecución por defender los argumentarios o los posicionamientos formales del sindicato" y, al mismo tiempo, ha asumido el compromiso de su defensa jurídica.

Comité de Bioética
Por su parte, el Comité de Bioética de Catalunya advierte en un informe de los "riesgos potenciales" del modelo de atención a la cronicidad avanzada y señala que uno de sus peligros es el de "estigmatizar" al enfermo y que ello "favorezca que no sea bien atendido, sobre todo en otros centros". 

El documento "Reflexiones sobre la ética en la identificación, el registro y la mejora de la atención de las personas en situación crónica de complejidad clínica y enfermedad avanzada" también expone la preocupación porque el marcaje de estos pacientes pueda generar "conductas no deseables de abandono o de limitación prematura de posibilidades beneficiosas". 

No obstante, el Comité de Bioética considera que la inclusión del paciente crónico complejo (PCC) o con enfermedad crónica avanzada (MACA) en programas específicos de atención es beneficiosa para identificar precozmente a estos pacientes y abrir gradualmente una perspectiva paliativa "orientada a mejorar su calidad de vida".