Metges de Catalunya (MC) y el resto de los sindicatos mayoritarios del comité de empresa del Hospital Santa Maria de Lleida han denunciado este miércoles el colapso "vergonzoso" que sufre el servicio de Urgencias de Salud Mental y han exigido a la gerencia de Gestió de Serveis Sanitaris (GSS), empresa pública que gestiona el centro, que “tome de forma urgente las medidas necesarias para que esta situación recurrente en el tiempo no vuelva a ocurrir”.
Las organizaciones sindicales han hecho saber que en estos últimos días se han llegado a acumular hasta 11 pacientes en esta área, cuando su capacidad es de cinco. "Es inadmisible tenerlos en el pasillo durante más de siete días, sin espacio ni las condiciones mínimas de intimidad y de higiene para ser atendidos como se merecen", han explicado en un comunicado conjunto MC, SATSE y CCOO.
Los representantes de los trabajadores y las trabajadoras han afirmado que es una "vergüenza" que la gerencia no haya previsto una solución, "aunque sea provisional", y más cuando la salud mental es uno de los ejes principales de actuación del Departament de Salut.
El delegado de MC en el hospital, Santiago Miguelsanz, ha asegurado que la clave para resolver esta situación no depende solo de la futura construcción de un nuevo edificio de hospitalización, que debe permitir ampliar el área de Salud Mental, “puesto que el servicio también arrastra un déficit importante de recursos humanos”. De hecho, actualmente, hay dos especialistas en psiquiatría de baja laboral, a los que la dirección no ha substituido.
Los tres sindicatos han criticado a la gerencia por atribuir la responsabilidad del colapso al nuevo jefe de servicio de Salut Mental, Jordi Blanch, que acaba de asumir el cargo no hace ni un mes, y han señalado al gerente de la empresa, Ramon Sentís, y al director del hospital, Guifré Palau, como únicos responsables, a los que han pedido su cese.
