Metges de Catalunya (MC) considera que la reforma del sistema de pensiones aprobada recientemente por el gobierno español penaliza otra vez al colectivo médico, sobre todo aquel que realiza jornada complementaria de atención continuada (guardias), ya que fija una cuota de solidaridad a partir del 2025 para las personas trabajadoras con los salarios más altos.
Concretamente, las remuneraciones que superen la base máxima de cotización, fijada ahora en 53.946 euros brutos anuales, tendrán que abonar el primer año entre un 0,92% y un 1,17% de la cantidad que sobrepase este umbral. Esta horquilla irá aumentado gradualmente hasta situarse entre un 5,50% y un 7% en 2045.
Esta tributación adicional afectará a la mayoría del personal facultativo debido al incremento de los ingresos económicos derivados de las guardias, que, tal y como recuerda el sindicato, “siguen sin contabilizar ni para la cotización a la Seguridad Social ni como tiempo de trabajo de cara al cálculo de la jubilación, aunque son horas de trabajo obligatorias hasta cierta edad que suponen un alargamiento considerable de la jornada laboral, de alta penosidad y pagadas a un precio inferior al de la hora ordinaria”.
La organización sostiene que se trata de una “injusticia”, dado que las guardias médicas comportarán una carga fiscal extra para el profesional que deberá tributar más, pero, en cambio, no verá aumentada su pensión de forma proporcional –solo se trasladarán los incrementos del IPC– y, menos aún, verá mejorados sus derechos a la hora de jubilarse.
En definitiva, MC desaprueba la reforma de las pensiones que acaba de entrar en vigor y reclama un nuevo marco regulador de la atención continuada que modifique, entre otros aspectos, su fiscalidad, pero también su organización y retribuciones.