Metges de Catalunya (MC) sostiene que, más allá del dispositivo asistencial de verano programado por el Departament de Salut, el principal problema que deben resolver los hospitales es la rapidez con la que actúan sus gerencias ante un repunte de las listas de espera quirúrgicas urgentes o un aumento puntual de la demanda asistencial y, por ello, reclama a los centros "capacidad de reacción y mucha flexibilidad" para abrir las camas y quirófanos imprescindibles, a fin de evitar atascos sanitarios.
El sindicato considera que se están dando “directrices contradictorias" desde Salut, ya que, por un lado, se asegura que los hospitales catalanes tienen instrucciones claras para reabrir tantos recursos asistenciales como sean necesarios, pero, por otro, continúan recibiendo órdenes para ahorrar medios y ajustarse a los presupuestos.
Ante esta situación, MC insta a los facultativos a aprovechar el compromiso político del conseller de Salut, Boi Ruiz, de abrir los recursos cerrados para esquivar los colapsos durante la época estival. "Si los médicos aprietan, se abrirán las camas que convengan", ha afirmado el secretario general del sindicato, Francesc Duch, en declaraciones a RAC1.
Así lo está haciendo la plantilla médica del Hospital de Blanes, que reclama a la dirección del centro que dé marcha atrás en el cierre de 12 camas de hospitalización de la planta de traumatología durante agosto, así como los jefes de servicio del Hospital de Bellvitge que han reclamado por carta el incremento de la actividad de los quirófanos, para drenar la lista de espera de intervenciones de cáncer, según publica el diario ARA.
Plan de verano
El plan de verano diseñado para Salut prevé que el sistema sanitario disponga de casi el 86% de los 13.297 camas de los hospitales de utilización pública de Catalunya, un 2% más que el año pasado. Aunque el número de plazas hospitalarias disponibles varía a lo largo del verano, la punta de cierre más alta coincide con la segunda quincena de agosto, cuando solo habrá 10.550 camas utilizables.El cierre de camas es progresivo y comenzó a principios de julio.
La planificación de Salut apunta a que el 1 de octubre los hospitales habrán recuperado la normalidad y volverán a funcionar al completo.