Metges de Catalunya (MC) reclama al Ministerio de Sanidad que apruebe una convocatoria extraordinaria con carácter "urgente" para los graduados en Medicina que el pasado sábado no pudieron realizar el examen MIR por ser positivos de COVID-19, porque presentaban síntomas compatibles con la enfermedad o porque se encontraban en cuarentena por contacto estrecho con un infectado. El sindicato considera "lamentable" que la autoridad sanitaria no haya previsto ninguna alternativa para que los aspirantes puedan ejercer su derecho a examen con seguridad y les relegue a la convocatoria de 2023.
Para MC, en el actual contexto pandémico y ante la "acuciante" falta de facultativos en el sistema público, se trata de una actuación "negligente e irresponsable", por parte del ministerio, prescindir durante un año de los servicios de profesionales sanitarios que, además de formarse, ofrecen un soporte asistencial imprescindible para el funcionamiento ordinario de la sanidad.
En este sentido, el secretario de residentes y facultativos jóvenes de MC, Àlex Mayer, añade que es "tremendamente injusto y discriminatorio" que los graduados que llevan un año preparando el MIR, "con todos los sacrificios que esto comporta", no puedan hacer el examen porque unos días u horas antes se han visto afectados por el coronavirus. "No es el primer año ni una situación imprevista, porque ya se sabía que la variante ómicron es muy contagiosa y podía producirse esta circunstancia. Es incomprensible que Sanidad no haya planteado un sistema alternativo que no deje en la estacada a unas personas que no tienen ninguna culpa de lo que les ha pasado", remarca.