Metges de Catalunya (MC) y el resto de los sindicatos con representación en la Junta de Personal del Hospital Arnau de Vilanova de Lleida piden en un comunicado conjunto que se depuren responsabilidades en la Conselleria de Salut por la situación sanitaria actual, derivada de la aparición de diferentes brotes de COVID-19 en las comarcas de Ponent.
Las organizaciones sindicales advierten que este contratiempo puede agravarse "en pocos días", sobre todo por la falta de un plan urgente de refuerzos de la plantilla sanitaria y de rastreadores. "El problema –explican– se ve incrementado con la falta de personal y de camas de críticos, el retraso de las intervenciones quirúrgicas y una atención primaria pobre y escasa que no puede atender toda la demanda de la población".
Además, añaden que los profesionales se encuentran agotados “física y psicológicamente" y que estos tenían la esperanza de poder descansar durante el verano "para poder retornar con energía".
Los representantes de la plantilla acusan a las autoridades sanitarias de "no escuchar nunca" las demandas del personal, que exige un incremento de los medios ante la infradotación presupuestaria. "El hospital se nos ha quedado pequeño para toda la región, siempre nos hemos visto abandonados y los últimos en recibir unos recursos insuficientes para ofrecer una asistencia de calidad", afirman.
Por todo ello, reclaman que se reconozca el "sacrificio" profesional de los sanitarios: "Queremos que se nos escuche y que se nos tenga en cuenta de una vez para siempre todas las carencias y recortes que hace años que venimos reivindicando".
