Como parte de los doce ejes prioritarios del Departament de Salut para los próximos cuatro años, el pasado 1 de julio el conseller Josep Maria Argimon anunció la incorporación de 150 nuevos profesionales en los equipos de atención primaria, buena parte de los cuales psicólogos. Esta medida forma parte del objetivo estratégico de potenciar y mejorar la red pública de salud mental que contará con una inversión adicional de 80 millones de euros.
Metges de Catalunya (MC) valora muy positivamente la decisión de priorizar un ámbito sanitario que muy a menudo ha sido "menospreciado y olvidado". Para el sindicato, la atención a la salud mental de la población en la post pandemia será tan importante como la asistencia de las patologías con diagnóstico retrasado o el seguimiento de la Covid persistente. Con todo, la organización señala que la necesidad de incorporar profesionales de la psicología "no puede hacer saltar las reglas del juego". En este sentido, MC reclama a Salut que respete la Ley Orgánica de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS), que define las atribuciones y competencias de los profesionales del sector, y no autorice la contratación de psicólogos en la sanidad pública que no acrediten la formación oficial de especialista en psicología clínica.
El sindicato médico alerta que la práctica de la Administración consistente en facilitar el acceso de profesionales no titulados al sistema "en ningún caso se hace para mejorar la calidad asistencial, sino que busca otros objetivos". La organización apunta, entre otros, a la falta de planificación que impide una correcta dotación de especialistas. Además, denuncia que, con la contratación de profesionales sin especialidad sanitaria, los gestores quieren profundizar en el modelo low cost, ya que las retribuciones que perciben los facultativos no especialistas son "sensiblemente inferiores" a las de los profesionales con título de formación sanitaria especializada. Para MC, la rebaja de costes con la contratación de profesionales no titulados no tiene cabida si sus tareas son idénticas a las de sus homólogos especialistas. "No se puede establecer una doble escala salarial", asegura.
En cuanto a la atención psicológica, MC recuerda que los psicólogos generales sanitarios con el título oficial de Máster en Psicología General Sanitaria, según la normativa vigente, pueden realizar tareas de investigación, evaluación o intervención psicológica en el marco del sistema de salud, pero cuando la actividad del profesional hace efectiva alguna prestación sanitaria incluida en la cartera de servicios públicos, ya sea en centros públicos o concertados, debe estar en posesión del título de especialista en psicología clínica.
"La falta de especialistas en el ámbito de la psicología clínica y la escasez de plazas de psicólogo interno residente (PIR) no es nueva y es fruto de la falta de planificación de la Administración y de unas condiciones laborales y retributivas poco atractivas y motivadoras para los profesionales. Pero la pandemia y sus efectos no pueden servir de pretexto para vulnerar la regulación y equiparar profesionales que no tienen la misma formación ni las mismas competencias", asevera MC.
Contratación sin especialidad homologada
Más allá del caso concreto de los psicólogos clínicos, MC ha denunciado en reiteradas ocasiones la práctica de algunas empresas sanitarias de contratar facultativos sin la especialidad médica homologada o reconocida por las autoridades de acreditación. Una vez más, la organización advierte que esta actuación "no se puede justificar por el mantra de la falta de profesionales, es contraria a la ley y no está exenta de riesgos".