Metges de Catalunya (MC) se muestra "sorprendido" e "indignado" ante el plan de verano ideado por el Departament de Salut para, supuestamente, reforzar las plantillas sanitarias, en un periodo donde la Administración prevé mantener abierto más del 90% de los recursos estructurales.
Para el sindicato, la fórmula propuesta por los responsables sanitarios recae, una vez más, en el sobreesfuerzo de los profesionales y el incremento de la sobrecarga de trabajo, tal y como dejó claro el pasado viernes la directora del Servei Català de la Salut (CatSalut), Gemma Craywinckel, en afirmar, en rueda de prensa, que no sacará de debajo de las piedras profesionales que no existen. “Los que están los buscaremos y les vamos a pagar”, dijo en referencia a la decisión de remunerar las jornadas suplementarias (horas extras) o ampliar los contratos para garantizar la cobertura asistencial de la población durante los meses de verano.
MC considera “vergonzoso” que Salut “se lave las manos” y se “resignen” ante la falta crónica de personal, “cargando sobre las espaldas de los profesionales las deficiencias del sistema y desistiendo de promover mejoras laborales y profesionales que eviten la fuga de facultativos y atraigan el talento de fuera”.
La organización advierte que las plantillas están "completamente exhaustas", tanto desde el punto de vista físico como psíquico, tras el incremento descomunal de la actividad asistencial derivada de la pandemia de COVID-19 y de la escasez de recursos humanos que arrastra la sanidad catalana desde hace más de una década, por lo que augura un aumento "preocupante" de las deserciones y de las bajas laborales entre el personal médico por ansiedad, depresión o estrés postraumático, si la Administración no lo remedia "de inmediato".
