Metges de Catalunya (MC), sindicato mayoritario en la sanidad pública catalana, reclama al nuevo conseller de Salut, Antoni Comín, que "pase página" y "entierre" los recortes sanitarios que a lo largo de los últimos cinco años "han puesto claramente en peligro los fundamentos del sistema". Para la organización, es "indispensable" recuperar el presupuesto sanitario previo a las políticas de austeridad del Govern, que se ha reducido un 14,3% desde el 2010, y restituir las condiciones laborales y salariales de los facultativos menoscabadas por el tijeretazo en la sanidad.
Además, el sindicato pide a Comín que fije las bases para ampliar la participación de los médicos "en todos los órganos de decisión asistencial y de gestión de las empresas e instituciones sanitarias", con el objetivo de incrementar la eficacia y la eficiencia del sistema, y reconocer de esta manera el peso específico del conocimiento médico.
Otra de las prioridades que plantea MC al nuevo titular de Salut es la paralización del trasvase de competencias médicas a otros profesionales sanitarios, "ya que se trata de una fórmula asistencial low cost para paliar los efectos del recorte de efectivos médicos". En este sentido, la organización recuerda que solo en el Institut Català de la Salut (ICS) la plantilla de facultativos se ha reducido en más de 1.100 profesionales durante el periodo 2010-2014, la mayoría de ellos en la atención primaria, "lo que conlleva una mayor saturación de las consultas, un incremento significativo de los tiempos de espera y una sobrecarga laboral insoportable".
El sindicato también insta a Comín a poner en marcha "políticas realistas" encaminadas a erradicar la precariedad laboral cada vez más extendida entre el colectivo médico y a construir un entorno profesional más favorable que revierta la migración de profesionales en el extranjero, visto que Catalunya se ha situado en 2015 como la comunidad autónoma líder en la emisión del certificado de idoneidad profesional necesario para que el médico pueda ejercer en otros países de la Unión Europea, según los últimos datos facilitados por la Organización Médica Colegial (OMC).
Respecto al diseño del modelo sanitario catalán, MC espera un "compromiso firme y sin fisuras" por parte de Comín en la defensa de un sistema sanitario público "blindado" al ánimo de lucro y, por tanto, a cualquier tipo de privatización o externalización de servicios. Asimismo, la organización requiere al nuevo conseller de Salut "decisión" para simplificar de "una vez por todas" la hipertrofia estructural, gerencial y de comandos que soporta el sistema y que consume una cantidad de recursos imprescindibles para la asistencia.
Ante estos retos que plantea la profesión médica, el sindicato desea "todos los éxitos posibles" a Comín, aunque reconoce que "no lo tendrá fácil", dado que la legislatura está programada solo a 18 meses y no carece de experiencia sanitaria. MC remarca que su nombramiento rompe con una tradición de consellers médicos que se ha mantenido en Catalunya desde la recuperación democrática, por lo que lo sitúa en una "situación de desventaja" en cuanto al conocimiento del sistema.
Boi Ruiz
Por otra parte, la organización despide el hasta ahora conseller de Salut, Boi Ruiz, con un "suspenso inapelable", principalmente por haber cargado la mayor parte del peso de los recortes sobre las espaldas del personal sanitario, sin olvidar el cierre de servicios y recursos y la puesta en marcha de controvertidos proyectos de reordenación sanitaria. Además, el sindicato recuerda que durante su mandato han proliferado varios casos de presunta corrupción vinculados a la sanidad catalana y se han incrementado los contratos de actividad al sector privado para prestar asistencia pública.
No obstante, el sindicato aprueba el afán de Ruiz para mejorar la transparencia del modelo sanitario, en el marco del cumplimiento de la Ley de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno aprobada por el ejecutivo catalán en 2014.