Una veintena de delegados de Metges de Catalunya (MC) de la atención primaria del Institut Català de la Salut (ICS) y de la red sanitaria concertada, tanto del primer nivel asistencial como de hospitales, han entregado este lunes un escrito en la Conselleria de Salut, en el que denuncian el incumplimiento de los acuerdos de salida de huelga de 2018 para mejorar las condiciones asistenciales y laborales del personal facultativo, y manifiestan que el colectivo se siente “traicionado, menospreciado y explotado” tres años después de las movilizaciones.
En una carta abierta dirigida al conseller de Salut, Josep Maria Argimon, el sindicato asegura que “el abandono y el desprecio reiterado de la Administración hacia el personal facultativo, y el agotamiento físico y emocional que ha supuesto la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus, con unas plantillas médicas esqueléticas, ha provocado una epidemia de enfermedad en nuestro estamento”, en referencia al burn-out, ansiedad y depresión que padecen los profesionales.
“Nos habéis abandonado a nuestra suerte, incluso, antes de la pandemia”, añade la organización que acusa a Salut de incrementar la cartera de servicios sanitarios sin aumentar la plantilla. "Hemos denunciado de forma continuada que, con estas condiciones, es imposible atender a la población con una mínima seguridad", señala y, al mismo tiempo, recalca que, desde el inicio de la pandemia, advirtió que "la falta de recursos en la sanidad pública tendría repercusiones en la morbilidad y mortalidad de la población catalana”.
Ante esta situación, MC exige a Argimon el cumplimiento íntegro de los acuerdos firmados en 2018 y el correcto dimensionamiento de la plantilla facultativa para poder dar respuesta a la demanda sanitaria, con los tiempos asistenciales óptimos. Asimismo, le reclama equiparar la inversión económica en salud a la de los países europeos del entorno, "priorizando aquellos servicios más castigados", y proteger la salud mental y física de los profesionales, entre otras medidas.
De lo contrario, el sindicato amenaza con plantear un nuevo calendario de movilizaciones. “Estamos junto a la ciudadanía, como demostramos cada día con nuestro trabajo, y siempre estaremos allí. Si tiene la voluntad de enderezar esta situación, nos encontrará, pero si no, no vamos a seguir participando en un sistema enfermo y obsoleto”, afirma.
De hecho, la organización recuerda a Argimon que ya ha puesto en marcha la campaña “Posa Límits”, para que los facultativos y las facultativas tomen conciencia de su fragilidad y velen por su salud física y mental, ante los aumentos de jornada laboral ocasionados por la pésima gestión sanitaria en recursos humanos. "No permitiremos que se siga abusando de nuestro colectivo", concluye.
