Metges de Catalunya (MC) ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo contra el Hospital Comarcal Sant Bernabé de Berga y la gerencia territorial Catalunya Central del Institut Català de la Salut (ICS) por infringir "gravemente" la normativa de riesgos y salud laboral en el centro de urgencias de atención primaria (CUAP), ubicado en las mismas instalaciones hospitalarias.
En concreto, el sindicato afirma que el espacio asistencial para las consultas de urgencia es muy reducido y estrecho, y, en algunos despachos, no hay ventanas y el botón de aviso para pedir ayuda está muy separado de la mesa. Además, detecta deficiencias en los dos boxes de urgencias del CUAP: uno se cierra con una cortina corta que no garantiza la confidencialidad del acto médico y el otro no dispone del material suficiente para la atención, circunstancia que obliga a los facultativos a pedir "continuamente" lo que necesitan al personal del hospital, "ralentizando la asistencia sanitaria de forma innecesaria".
Por otra parte, MC se queja de que la zona de descanso y el comedor para el personal sanitario están "muy alejados" –dos pisos de diferencia– de las consultas de urgencias. Esta distribución hace que los médicos y las médicas del CUAP se vean forzados a utilizar las consultas también para descansar y comer, ya que la localización de estos espacios "es incompatible con la celeridad en la asistencia que requiere el servicio de urgencias".
El sindicato recuerda en la denuncia que viene notificando estas infracciones de la normativa de prevención de riesgos y salud laboral desde hace dos años, tanto a las juntas de personal como a los comités de seguridad y salud de la gerencia territorial Catalunya Central del ICS, así como también a la Comisión Paritaria de Prevención de Riesgos Laborales del ICS, "sin obtener respuesta".
En consecuencia, MC sostiene que la parte denunciada "ha incumplido su deber de proteger la seguridad y la salud laboral de los facultativos del CUAP Berga, tanto en lo referente a la prevención previa de los riesgos como a las medidas correctoras que debería haber implantado una vez las personas trabajadoras le comunicaron, de forma reiterada y finalmente por escrito, la precaria situación en que se encuentran".
Por este motivo, la organización pide a la Inspección de Trabajo que, por un lado, actúe "con la mayor celeridad y contundencia posible" para instar a las partes demandadas a crear nuevas consultas de urgencias y adecuar las ya existentes, de acuerdo con la normativa de prevención de riesgos y salud laboral, y, por otro, requiera la ubicación de la zona de descanso y del comedor en la misma planta donde está emplazado el CUAP.