Tras la reunión mantenida el 10 de marzo con la Subdirección Provincial de Incapacidad Temporal y Otras prestaciones, Metges de Catalunya (MC) ha trasladado por escrito a la Dirección Provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) de Barcelona una petición de control de las mutuas laborales por parte del organismo público con el objetivo de asegurar el reconocimiento de la COVID-19 como accidente de trabajo para los profesionales de los servicios sanitarios que han contraído el coronavirus mientras prestaban asistencia.
El sindicato médico ha alertado al INSS que facultativos afectados de COVID-19, "algunos todavía de baja y otros con secuelas", no han conseguido que la mutua laboral les reconozca la incapacidad laboral como accidente de trabajo, a pesar del informe favorable de sus respectivos servicios de prevención.
Esta inacción provoca, según la organización, que las personas afectadas no disfruten de los derechos que les ha otorgado el decreto del gobierno central que asimila la incapacidad por accidente de trabajo a la enfermedad profesional en los casos de profesionales sanitarios contagiados de COVID-19. Entre otros, los controles periódicos de salud, la evaluación de las secuelas y el tratamiento farmacológico de las mismas. Asimismo, tampoco han podido solicitar un recargo sobre las prestaciones recibidas por no haber evaluado los riesgos existentes o por la falta de medidas de seguridad y equipos de protección.
MC espera que el INSS notifique a las mutuas la obligatoriedad de tipificar las bajas de los facultativos infectados como accidente de trabajo y supervise que el procedimiento no sufre retrasos que podrían detraer derechos a los afectados.
