Metges de Catalunya (MC) confía en que el anuncio del cese de Joaquim Casanovas como director gerente del Institut Català de la Salut (ICS) ponga punto y final a la etapa más "funesta" de la empresa, en la que el colectivo médico se ha sentido "maltratado" y el sistema sanitario público se ha debilitado debido a la disminución de un 10 % del presupuesto de la entidad.
Aunque reconoce el talante "afable" y "cordial" de Casanovas, dos paradojas han ilustrado su "nefasto" mandato al frente del ICS, según el sindicato. Por un lado, el sueldo del médico se ha reducido un 30%, pese a que la empresa cerró el ejercicio de 2012 con superávit, y por otro, la plantilla médica ha disminuido progresivamente, pero no así el número de cargos directivos.
En el aspecto salarial, MC critica sobre todo el recorte de la mitad del complemento de productividad variable por objetivos (DPO), incluido en los presupuestos de la Generalitat de 2012, que el ICS aplicó retroactivamente sobre los incentivos pactados el año anterior. Para la organización, esta medida ha evidenciado una falta de rigor por parte de la empresa que ha afectado su credibilidad e imagen ante el médico de forma “casi irreversible”.
Asimismo, censura la proliferación de los contratos basura, el cierre de camas hospitalarias y centros de atención continuada, y el incremento sustancial de las listas de espera, durante los dos años y medio en los que Casanovas ha ocupado la gerencia del ICS.
El sindicato también desaprueba la disminución de un 13,3% del presupuesto de atención primaria y de un 7,7% del de hospitales, una circunstancia que ha provocado la no renovación de los equipamientos clínicos, "los cuales sufren un proceso de obsolescencia sin precedentes", señala.
Además, rechaza la decisión de Casanovas de promover la atribución de competencias médicas a otros profesionales sanitarios para paliar los efectos del recorte de plantilla, "sin un control riguroso de estos procesos, ni unos protocolos consensuados en el seno de los equipos multidisciplinares", tal como ha reclamado MC con la complicidad de los colegios médicos.
Aparte de eso, la organización aplaude la implantación creciente de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en la red sanitaria, impulsada por el hasta ahora gerente del ICS, aunque lamenta que no haya atendido a las demandas médicas para mejorar su desarrollo, como en el caso del programa informático e-CAP para gestionar las historias clínicas en atención primaria. Según el sindicato, esta herramienta presenta deficiencias importantes que dificultan la labor asistencial del médico, en lugar de facilitarla.
En cuanto al proceso de fragmentación del ICS, MC lamenta el intento de Casanovas de desarrollar este proyecto, ideado por el ex presidente de la entidad Josep Prat, y reitera su oposición a la fragmentación de la empresa, ya que sospecha que el plan “servirá para eludir los mecanismos de control del gasto público".