Metges de Catalunya (MC) se felicita por la decisión que ha tomado este lunes la comisión de Economía y Hacienda del Parlament de tumbar, con el voto en contra de toda la oposición, el dictamen del proyecto de ley de contratos de servicios a las personas –conocida como ley Aragonès– que abría la puerta a una externalización masiva de prestaciones sanitarias, sociales y educativas públicas. De este modo, la nueva normativa finaliza su recorrido y no verá la luz esta legislatura.
El sindicato ha expresado, en reiteradas ocasiones, su rechazo al polémico proyecto de ley, al entender que el Govern pretendía "construir una autopista libre de impedimentos legales para privatizar el sistema sanitario público a marchas forzadas". Desde un primer momento, la organización ha defendido que la gestión pública es la "mejor fórmula de prestación de servicios básicos y fundamentales para la ciudadanía", como la sanidad, y ha advertido que la contratación a terceros con ánimo de lucro es una "vía para transferir recursos públicos al sector privado".
Tras el decaimiento de la ley Aragonès, MC espera que el nuevo ejecutivo que surja de las futuras elecciones al Parlament "no cometa el mismo error y blinde el sistema sanitario público de la ola privatizadora que amenaza a los servicios públicos desde hace décadas".
La ley de contratos de servicios a las personas fue impulsada por el conseller de Asuntos y Relaciones Institucionales y Exteriores y Transparencia, Raül Romeva, en la anterior legislatura. La intervención de la autonomía, con la aplicación del artículo 155 de la Constitución por parte del gobierno español, paralizó la nueva regulación y, a finales de 2018, el actual vicepresidente del Govern y conseller de Economía y Hacienda, Pere Aragonès, la volvió a defender en el Parlament.