Metges de Catalunya (MC) ha rechazado este miércoles la propuesta de texto articulado sobre contratación que han presentado las patronales de la sanidad concertada en la mesa de negociación del nuevo convenio colectivo del Sistema Sanitario Integral de Utilización Pública (SISCAT), ya que deja muchos aspectos sin concretar y abre la puerta a la interpretación interesada del reglamento por parte de las empresas.
En este sentido, el sindicato ha reclamado "claridad" y "concreción" para evitar posibles actuaciones sesgadas que vayan en contra de los derechos de los profesionales, y ha pedido que la transposición de la nueva regulación del Estatuto de los Trabajadores, en cuanto a la reglamentación contractual, sea "objetiva".
La negativa de MC y del resto de organizaciones sindicales a aceptar la propuesta patronal ha obligado a las corporaciones sanitarias a crear una comisión de trabajo específica sobre contratación para intentar desbloquear las negociaciones de este punto.
Por otra parte, y pese a los requerimientos reiterados del sindicato médico, las patronales todavía no han querido concretar si, finalmente, la retribución variable en función de los objetivos (DPO) de 2022 se vinculará de forma íntegra a la gestión de la pandemia de COVID -19, como se acordó el año pasado a petición de MC.
En definitiva, después de 22 reuniones de la mesa negociadora y de repasar uno por uno todos los artículos –excepto las disposiciones transitorias– del futuro acuerdo sobre las condiciones de trabajo del personal del SISCAT, “todo estar por hacer”, han lamentado los representantes médicos, que han acusado a las asociaciones empresariales de querer "eternizar" la precariedad laboral. Y todo ello a tres meses para que finalice la ultraactividad del convenio en vigor.
