El personal sanitario del Hospital Sant Joan de Déu de Manresa, gestionado por la Fundación Althaia, ya no puede más. La ola de gripe, Covid y otras infecciones respiratorias de las últimas semanas ha provocado un colapso asistencial en la gran mayoría de los servicios de urgencias hospitalarias y centros de atención primaria (CAP), y el centro manresano es un ejemplo. El aumento de las visitas ha incrementado el tiempo de espera de los pacientes para ser atendidos y ha provocado demoras a la hora de subirlos a planta, entre otros efectos, ya que “no disponen de los recursos humanos, materiales y de espacio necesarios” para hacer frente a la demanda.
Así lo manifiesta el comité de empresa del centro, que hace meses que reclama soluciones a la problemática –que es habitual–, aunque esta se acentúa y se hace incluso más evidente durante los meses de invierno. “Es una situación previsible que se repite cada año, pero no se actúa ni se proporcionan refuerzos en momentos de mucha presión y, por lo tanto, el hospital no está a la altura cuando vienen epidemias”, la cual cosa “perjudica directamente a la seguridad de la población atendida”.
La delegada de Metges de Catalunya (MC) y cirujana en el hospital, Mercè Güell, lo atribuye, en parte, a la dificultad a la que se enfrentan los centros sanitarios alejados de la capital catalana a la hora de contratar personal. “Cuanto más lejos estemos de Barcelona, más cuesta cubrir las plazas”, lamenta, pues sostiene que las nuevas generaciones de facultativos y facultativas, una vez obtienen la especialidad, prefieren irse a sitios más atractivos, con mejores condiciones y oportunidades a nivel de investigación.
Aunque desde el centro hospitalario aseguran que la atención está garantizada para todos los pacientes, la calidad de esta solo es posible gracias al sobreesfuerzo que hacen los profesionales. “Esta es una realidad que, por desgracias, viene determinada por la falta de personal médico, de modo que cada vez hay una mayor delegación de funciones hacia el servicio de enfermería porque no llegamos a todo”, expresa la delegada sindical. Asimismo, en Althaia cada vez cuesta más cubrir las bajas del personal, que también se incrementan en la época invernal puesto que los virus afectan a todos por igual.
La empresa insiste, pues, en que necesita “más recursos humanos y materiales para poder sobrevivir a los colapsos asistenciales”, y reclama más personal, sobre todo de refuerzo, para las áreas que acostumbran a estar más colapsadas, como por ejemplo las de urgencias. “Dotar el hospital de los recursos y el personal necesarios es imprescindible para su buen funcionamiento”, concluye Güell.