El Consejo de Colegios de Enfermeros y Enfermeras de Cataluña (CCIIC) ha compartido recientemente un comunicado en el que defiende que este colectivo pueda proponer una incapacidad temporal (IT) en beneficio de la persona atendida, registrando el motivo de consulta, el tipo de baja, la empresa donde trabaja, y la duración prevista en un documento que, posteriormente, deberá revisar y firmar un médico o médica. El escrito ha despertado opiniones contrarias entre los sindicatos de enfermería, pero Metges de Catalunya (MC) se muestra favorable, aunque puntualiza que las bajas más largas y complejas deben ser siempre evaluadas por el personal facultativo.
A pesar de que SATSE se ha opuesto al considerar que esta tarea “excede sus competencias”, el sindicato médico recuerda que, aunque el personal de enfermería no puede prescribir bajas, sí puede sugerirlas cuando lo considere necesario. Tal como defienden los colegios, esto es “totalmente ético y legal”, siendo una competencia propia de la colaboración entre profesionales.
No obstante, hay que tener claras las diferencias entre la diagnosis enfermera y la médica. Los primeros hacen diagnósticos basándose en criterios enfermeros, pues se define como “el resultado del juicio clínico sobre la respuesta de una persona, una familia o una comunidad para hacer frente a problemas de salud o procesos vitales reales o potenciales”. En el médico, en cambio, se hace un diagnóstico clínico a partir del “estudio de los síntomas y signos de la enfermedad que el médico o médica recoge directamente” del enfermo o de la familia, y modulado por la comunidad donde reside.
De todos modos, la organización recuerda que no existe ninguna orden expresa al personal enfermero para hacer propuestas de incapacidad temporal, lo cual puede propiciar la creación de disparidad de opiniones o posicionamientos, como ha pasado estos días. Por eso, MC insta al CCIIC a pedir tanto al Instituto Catalán de la Salud (ICS) como a otras entidades sanitarias una actualización de los protocolos para que introduzcan una clara determinación de las acciones del colectivo enfermero respecto a las propuestas de IT, evitando así más malentendidos de este tipo.
Autojustificación de bajas cortas
En esta línea, MC ya ha expresado en otras ocasiones su deseo de minimizar al máximo los procesos burocráticos que no tienen valor clínico en las consultas médicas para evitar los bloqueos de la asistencia sanitaria. Las bajas de corta duración son, precisamente, un ejemplo.
La organización sindical recuerda su petición de recuperar el mecanismo de solicitud de baja laboral a través del certificado autorresponsable, que permite a los usuarios tramitar la incapacidad de trabajo de corta duración sin tener que desplazarse a un centro de salud. Se trata de una solución que ya funcionó durante la pandemia de la COVID-19, demostrando su eficacia en la reducción de las visitas en los CAP.
Así pues, del mismo modo que MC pretende que la población se pueda autodiagnosticar reposo y autogestionarse las bajas de hasta tres días si lo considera oportuno, naturalmente, el sindicato quiere favorecer que el personal de enfermería pueda hacer lo mismo con las ITs de corta duración.