Metges de Catalunya (MC) hace una valoración positiva del cambio de modelo de gestión del nuevo CAP Can Roca de Terrassa anunciado el viernes 17 de febrero por el consejero de Salud, Manel Balcells, a la Comisión de Entidades por la Defensa de la Sanidad Pública de Terrassa de la que forma parte el sindicato médico. Tal y como habían reclamado las asociaciones y movimientos vecinales de la ciudad vallesana, con el apoyo de MC, las derivaciones hospitalarias (urgentes y programadas) de los pacientes asignados al CAP Can Roca serán gestionadas íntegramente por el Consorci Sanitari de Terrassa (CST), revirtiendo el modelo de gestión mixto que se había implantado desde la entrada en funcionamiento del dispositivo que comportaba la derivación de los pacientes a la atención especializada de Mútua de Terrassa, entidad privada concertada.
MC, representado por su secretario general y delegado de la organización en el CST, Xavier Lleonart, considera que la decisión de Salud es un "paso importante" y “en la dirección correcta”, ya que refuerza la sanidad pública de la tercera ciudad de Cataluña, con un modelo de atención integral y funcional por parte del CST, que "beneficia el servicio asistencial que recibe la población".
Nuevos CAP y CUAP
En su visita institucional a Terrassa, el consejero Balcells ha anunciado también la construcción de tres nuevos equipamientos sanitarios en la ciudad: un centro de urgencias de atención primaria (CUAP) y dos nuevos CAP que deben servir para descongestionar el primer nivel asistencial, incrementar el personal sanitario y mejorar la accesibilidad a los servicios de salud de los egarenses.
Estas nuevas infraestructuras, cuya finalización está prevista para los años 2026 y 2027, están "totalmente justificadas", a juicio de Lleonart, porque Terrassa, con una población superior a los 220.000 habitantes, cuenta con tres de los CAP más saturados y con más población asignada de Cataluña, como son el CAP Terrassa Nord, el CAP Sant Llàtzer y el CAP Rambla.
Por este motivo, el responsable sindical pide que el plan sanitario previsto para la cocapital vallesana quede "blindado" y no dependa de las personas o los partidos que gobiernen el Ayuntamiento de Terrassa o la Generalitat. Asimismo, insta a las instituciones implicadas a cumplir los plazos de ejecución previstos, "sin retrasos", para corregir con prontitud las deficiencias sanitarias que el pasado 14 de enero sacaron a miles de personas a las calles de la ciudad en defensa de una sanidad pública de calidad.