Cerca de una treintena de facultativos del Hospital Santa Maria de Lleida, con el apoyo y el asesoramiento jurídico de Metges de Catalunya (MC), se han plantado y han decidido no realizar más horas de atención continuada (guardias) que las 499 horas anuales máximas exigibles por convenio colectivo, dada la “situación extrema” de agotamiento físico y mental que sufren estos profesionales de los servicios de medicina interna, geriatría y unidad de cuidados intensivos (UCI), y del Programa de Atención Domiciliaria y Equipos de Apoyo (PADES).
Los afectados, muchos de los cuales también cubren las vacantes de la plantilla médica en el Hospital Arnau de Vilanova, han presentado este jueves un escrito dirigido al gerente territorial del Institut Català de la Salut (ICS) en Lleida y el Alt Pirineu y Aran, y Gestió de Serveis Sanitaris (GSS), Ramon Sentís, en el que señalan que el estado de saturación en cuanto a la realización de la jornada de atención continuada “se ha vuelto totalmente insostenible”. Así, afirman que, si de aquí a finales de año mantienen su jornada ordinaria prevista y las guardias de presencia física programadas, sobrepasarán igualmente la jornada anual máxima de 2.187 horas pactada en el convenio.
Por eso comunican a Sentís que no harán ni una hora más de las acordadas y le piden una “reunión urgente” para adecuar los calendarios laborales de los facultativos a la normativa vigente. De no consensuar una solución, advierten que la atención continuada de determinados servicios podría quedar sin cubrir algunos días, así como también la jornada ordinaria, dado que los profesionales habrían cumplido las 2.187 horas anuales antes de llegar al 31 de diciembre de 2021.
Quemados
Para el delegado de MC en el Hospital Santa Maria, Santiago Miguelsanz, este conflicto evidencia la carencia de personal que azota el sistema sanitario catalán y la nula planificación de sus responsables. "No podemos aguantar más, estamos totalmente agotados y quemados", exclama. “Es inadmisible –añade– que haya médicos que hayan hecho siete guardias alternadas, un día sí y un día no, durante dos semanas sin poder disfrutar de los descansos fijados por ley, o que la dirección del centro haya permitido a un facultativo hacer dos días seguidos de guardia”.
Miguelsanz recuerda que, el pasado mes de julio, el sindicato ya avisó al hospital de que algunos especialistas habían realizado el número máximo de horas de guardia anuales previstas en el convenio y que se tenía que resolver con rapidez esa anormalidad.
El plante de los facultativos en Lleida es el preámbulo de la campaña que pondrá en marcha próximamente MC, para que los profesionales de la medicina actúen de manera decidida y pongan límites a los excesos de jornada laboral, tras constatar mediante una encuesta que siete de cada 10 médicos y médicas presentan algún síntoma compatible con el síndrome de burn-out.