En el marco de la celebración el pasado 10 de diciembre del Día de los Derechos Humanos, Metges de Catalunya (MC) pone de relieve el significado que adquiere el artículo 24 de la Declaración Universal de Derechos Humanos en el contexto actual de precariedad sanitaria y sobreesfuerzo sostenido de la plantilla médica durante muchos años: “Toda persona tiene derecho al descanso y al ocio y, particularmente, a una limitación razonable de la jornada de trabajo (....)”, señala la disposición aprobada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Según el sindicato, este precepto contrasta con los incrementos sistemáticos de jornada laboral que están imponiendo las gerencias de los centros sanitarios al personal facultativo, para contrarrestar el notable déficit de profesionales derivado de la infradotación de recursos del sistema. Una circunstancia que "dificulta el descanso y pone muchas trabas a la conciliación laboral y personal de los médicos y las médicas", remarca la organización.
Por este mismo motivo, MC puso en marcha hace un mes la campaña “Posa Límits” (“Pon Límites”) para que el colectivo médico tome conciencia de su fragilidad y vele por su salud física y mental, frente a los aumentos de jornada laboral. En concreto, la entidad ha puesto a disposición de los profesionales de la medicina un documento para que notifiquen a las direcciones o gerencias de su centro de trabajo y, al mismo tiempo, al departamento de recursos humanos correspondiente su intención de no realizar más horas anuales de trabajo durante 2022 que las que son exigibles por ley (2.187 horas como máximo entre la jornada ordinaria y la de atención continuada, respetando los descansos mínimos diarios y semanales).
Asimismo, en el escrito también consta su renuncia a trabajar fuera del horario de la jornada laboral habitual para realizar actividad extraordinaria (peonadas), ya que esta es voluntaria, según la normativa vigente.