MC celebra que la totalidad de plazas MIR hayan sido ocupadas, pero pide que no se saquen “conclusiones precipitadas”

Acte de tria de places a la seu del Ministeri de Sanitat

Por primera vez desde el año 2021, todas las plazas de formación sanitaria especializada (FSE) que se ofrecían en las unidades docentes catalanas han sido asignadas en la primera convocatoria de adjudicación, que, en el caso de Medicina, se ha llevado a cabo entre los días 5 y 28 de mayo. Metges de Catalunya (MC) celebra que se haya producido un “retorno en la normalidad”, pero a la vez pide cautela y “no sacar conclusiones apresuradas” hasta que no se compruebe si se trata de una tendencia sostenida en el tiempo. Además, recuerda que, antes de asegurar que no habrá plazas vacantes, “hay que esperar a las renuncias que se puedan producir antes o una vez los nuevos residentes se incorporen a los centros”.

En Cataluña, se han adjudicado 1.931 plazas de FSE, de las cuales el 74% (1.433) corresponden a especialidades médicas (MIR). El sindicato considera que la eliminación de la nota de corte, que ha facilitado el acceso en primera convocatoria a un mayor número de aspirantes, y la recuperación de la presencialidad en el proceso de elección, que permite a los candidatos hacer las suyas eliges en directo, han sido fundamentales para que se haya podido ocupar el 100% de las plazas disponibles. En el caso de medicina familiar y comunitaria, la especialidad con más oferta formativa, se han agotado las 367 plazas que se ofrecían a las unidades docentes de atención primaria después de que entre los años 2022 y 2024 se acumularan hasta 161 puestos vacantes entre plazas no elegidas y renuncias.

Para MC, se trata de una buena noticia, especialmente para los CAP que esperan los refuerzos que suponen cada año la incorporación de los nuevos residentes. Según la organización, el programa de incentivos económicos destinado a los MIR de familia y los esfuerzos realizados para prestigiar la especialidad han podido ayudar a la ocupación de la totalidad de las plazas, pero reitera que conviene analizar los datos con “mucha prudencia”, puesto que, “si no se mejoran las condiciones de trabajo y se invierten más recursos a la atención primaria, difícilmente se podrán fidelizar a los profesionales para que se queden en el sistema después de obtener el título”. En este sentido, el sindicato expone que, según datos del Instituto Catalán de la Salud (ICS), más del 40% de los residentes de atención primaria no continúan a la entidad una vez finalizan su formación.