
Metges de Catalunya (MC) lanza una edición limitada de 300 muñecos de facultativos de atención primaria, numerados y exclusivos! ¡Son los profesionales perdidos desde el año 2010 que ahora puedes coleccionar en tu casa! Incluye diferentes especialistas clínicos del primer nivel asistencial, cada uno de ellos con sus respectivos accesorios. ¡Hazte con el tuyo antes de que se agote o se extinga!
Con motivo del Día Internacional de la Atención Primaria, que se conmemora el 12 de abril, MC comparte una campaña irónica y reivindicativa para seguir denunciando la precariedad de recursos que desde hace 15 años afecta este ámbito asistencial, el más afectado por los recortes sanitarios y por la pandemia de la COVID.
A pesar de las intenciones manifestadas por los diferentes gobiernos y la grandilocuencia discursiva (la atención primaria es el eje vertebrador, el pal de paller del sistema...), el sindicato médico denuncia la prevalencia del déficit de personal facultativo, de la sobrecarga asistencial, de los excesos de jornada, de las dificultades de conciliación y de las condiciones laborales y retributivas que han desprestigiado entre el colectivo médico el ejercicio profesional en la atención primaria.
MC acusa a la Administración de no revertir la descapitalización de profesionales médicos que se aplicó durante los recortes. Así, según los datos oficiales de los informes de gestión del Consejo de Dirección del Instituto Catalán de la Salud (ICS), entre los años 2010 y 2021 se perdieron unos 689 de facultativos de atención primaria, de los cuales 300 todavía no se han recuperado.

Además, esta pérdida de recursos se ha producido mientras Cataluña ha experimentado un crecimiento significativo de su población. En el año 2010, el país contaba con la 7.481.935 habitantes y actualmente se acerca a los 8.100.000. Esto representa un incremento superior a 600.000 personas. Asignando una media de 1.500 personas a cada médico de familia, serían necesarios unos 410 médicos más en la atención primaria para atender a la población. De este modo, teniendo en cuenta los profesionales perdidos y los no contratados para hacer frente al crecimiento demográfico, la cifra de facultativos necesarios en el primer nivel supera los 700.
La mala imagen de la atención primaria se ha acabado trasladando a la formación MIR, que desde el año 2022 acumula 161 plazas de residentes no ocupadas por la falta de interés de los graduados en la especialidad de medicina familiar y comunitaria.

Las condiciones de trabajo son desalentadoras por las nuevas generaciones de facultativos. Entre las razones esgrimidas para no elegir la especialidad de medicina familiar se encuentran la sobrecarga de trabajo, los problemas para conciliar o las bajas retribuciones en comparación con los países del entorno.