El 1948 se fundó la Organización Mundial de la Salud (OMS) y, desde el 1950, cada 7 de abril se conmemora la efeméride con la celebración del Día Mundial de la Salud, centrándose un área específica de interés para la entidad. El lema escogido para este año es Salud para todos y, coincidiendo con su 75º aniversario, la OMS ha analizado los logros realizados a lo largo de su historia y ha remarcado sus principales objetivos y reivindicaciones, los cuales Metges de Catalunya (MC) comparte.
La Constitución de la entidad afirma que la salud es uno de los derechos fundamentales de los seres humanos, sin hacer ninguna distinción de su raza, religión, ideología política o condición económica o social. Así pues, la organización vela porque toda la ciudadanía pueda disfrutar de buena salud y por eliminar las amenazas que suponen las desigualdades en la atención sanitaria que todavía continúan existiendo en la actualidad.
En este sentido, el sindicato médico reivindica la necesidad de que la salud sea un foco prioritario para todos los gobiernos, a los que insta a mejorar la inversión que hacen para fortalecer el sistema público de salud. Y es que, para que la población pueda disfrutar de una cobertura sanitaria universal y de calidad, primero se debe disponer de unas condiciones laborales, profesionales y retributivas dignas que permitan contar con el personal necesario, el tiempo asistencial suficiente para cada visita y unas agendas descargadas.
Por otro lado, la OMS lucha por mejorar nuestro entorno y las condiciones en las que vivimos para que las personas “nazcan, crezcan, trabajen, vivan y envejezcan con buena salud”, pero esto a menudo se ve amenazado por las desigualdades que existen en la atención sanitaria. Teniendo en cuenta que la esperanza de vida ha aumentado notablemente en las dos últimas décadas y que, en consecuencia, cada vez hay un porcentaje más alto de gente mayor que sufre enfermedades crónicas, el sindicato médico remarca que el personal facultativo ha de disponer de los recursos, formación y tiempo necesarios para atender a todos los pacientes en las mismas condiciones.
Nuevas pandemias, nuevos efectos del cambio climático perjudiciales para la salud y nuevas enfermedades son algunas de las adversidades a las que a menudo han de enfrentarse los profesionales sanitarios. Por eso, en días como este, hay que concienciar a todo el mundo de la importancia que tiene disponer de buenos sistemas de salud que permitan atender a la población con la mayor brevedad y las mejores condiciones posibles para aligerar sus consecuencias, ya que todos los ciudadanos merecen una sanidad pública óptima.