Metges de Catalunya (MC) insiste en pedir al Govern que retire la tasa del euro por receta, después de que el Consejo de Estado haya considerado inconstitucional esta medida que entró en vigor el 23 de junio pasado, y recuerda que, hace un año, ya advirtió el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que el llamado ticket moderador podría vulnerar la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos del año 2006.
En este sentido, el sindicato fue la primera organización en señalar que la implantación del euro por receta, incluida en la hoja de ruta económica para 2012 que el propio Mas presentó a finales de noviembre del año pasado, suponía un '"agravio'" para los enfermos crónicos y contravenía la normativa vigente, ya que las comunidades autónomas '"no tienen competencia para imponer tasas sobre los precios de los fármacos'".
Una vez conocido el dictamen del Consejo de Estado -órgano consultivo del gobierno español- MC se reafirma en su posición contraria al euro por receta y mantiene que esta tasa '"rompe'" el principio de igualdad territorial en el el acceso a los medicamentos y '"castiga'" a los ciudadanos de Catalunya con un '"doble peaje'" sobre los fármacos: por un lado, el euro por receta y, por otro, el nuevo copago farmacéutico, aprobado por el Ejecutivo central el pasado abril, medidas a las que hay que añadir la retirada de la financiación pública de 417 medicamentos de consumo habitual.
El sindicato reitera que hay otras fórmulas que generarían un ahorro mayor sobre el gasto farmacéutico, como la financiación selectivo de los medicamentos más económicos, en igualdad de principio activo y de dosis, o la retirada de la aportación económica estatal a los fármacos sin eficiencia terapéutico acreditada.
Metges de Catalunya reitera su petición al Govern para que retire el euro por receta después del dictamen del Consejo de Estado
Contacte de premsa
premsa@metgesdecatalunya.cat
Telèfon: 93 265 11 77 ext. 5
Fax: 93 265 39 71
Secretaria de Comunicació: David Arribas
Equip de comunicació: Albert Torres, Laia Calaf i Eva Martínez